Dos años antes de dejar el poder, Juan Carlos Varela y el empresario Guillermo Liberman promovían y planificaban un proyecto en las instalaciones del Aeropuerto Internacional de Tocumen. Las filtraciones del celular del expresidente, publicadas en el portal Varelaleaks, develan cómo Varela, desde el poder, planeó el negocio del combustible con su amigo Liberman.
A principios de mayo de 2017, después de un viaje que hizo a Chile, el entonces presidente le comentó al empresario el interés que habían mostrado los dueños de una empresa en un ducto de combustible para aviones en la principal terminal aérea del país, el Aeropuerto Internacional de Tocumen.
En ese momento, ya Liberman estaba preparando un proyecto para presentarlo a la administración del aeropuerto. “Te quiero hacer un update (actualizar) del estudio para el pipeline (ducto) que le vamos a presentar a Tocumen”, le dijo el empresario en una conversación que sostuvieron el 2 de mayo de 2017. “Perfecto”, respondió Varela.
En abril de 2017, Varela realizó movimientos en su gobierno. En la gerencia de Tocumen, S.A. designó a Carlos Duboy, quien había sido su jefe de campaña, copartidario y amigo. Aparentemente la obra no tendría mayores inconvenientes para pasar los filtros administrativos. “Ahora tengo a Duboy… Totalmente de acá”, dijo Varela a Liberman.