El exvicepresidente argentino Amado Boudou fue condenado el martes a cinco años y 10 meses de prisión por un caso de corrupción en el que se investigó la compra irregular de una empresa que imprimía papel moneda para el Estado.
El Tribunal Federal 4 de la ciudad de Buenos Aires consideró que en 2010 Boudou -por entonces ministro de Economía de la expresidenta Cristina Fernández de Kirchner- intercedió para levantar la quiebra de la firma Ciccone a cambio de quedarse con parte de la empresa a través de un testaferro.
El exvicepresidente, que fue detenido de forma inmediata, se había declarado inocente y había señalado que la condena en su contra era parte de una persecución política contra exfuncionarios del gobierno de centroizquierda de Fernández.
“Los políticos que caminan por el carril que los poderosos deciden, caminan sin problemas. Los políticos que deciden cambiar la realidad, son perseguidos (…) Hay una cuestión de revancha, hay una cuestión de revancha de clase”, dijo Boudou antes de conocer el veredicto.