A pesar del destrozo económico generado por la profunda y larga recesión sufrida por el mundo desarrollado, y la percepción de que el sistema económico está exhausto, el liberalismo económico vive su mejor momento histórico, según se desprende del índice de libertad económica que publica desde hace 30 años (1995) la fundación Heritage, el centro de pensamiento estadounidense que promueve la mínima intervención gubernamental y la máxima libertad de empresa y del individuo.
En el análisis realizado a las políticas económicas de 186 países para configurar el índice de este año, que valora la situación entre mediados de 2014 y 2015, muestra que el liberalismo ha avanzado por cuarto año consecutivo, con una media de mejora de 0,3 puntos sobre el año anterior. En el apartado de libertad económica, la calificación media de 60,7 puntos es la más alta desde que se publica el índice, lo que muestra el continuo avance del sistema de libre mercado, aceptado por la mayor parte de los gobiernos como el que permite con más probabilidad mejorar el bienestar de sus ciudadanos y la eliminación de la pobreza. Este récord se produce en un momento de tentación intervencionista en muchos países.
España también ha avanzado posiciones en materia de libertad económica, clasificándose en el puesto número 43 del mundo y el 20 en Europa, frente al 49 y 21 del año anterior, con una puntuación de 68,5 puntos, nueve décimas por encima del índice precedente. La Heritage rebajó la puntuación de España en el capítulo de libertad laboral y empresarial, por considerar que sigue habiendo demasiadas trabas regulatorias e impuestos a la actividad empresarial, aunque la puntuación es de 76 puntos, y no suficiente flexibilidad laboral, 51,7 puntos. La única variable que baja de los 50 puntos es la del gasto público, 41,1 puntos, más alto en cualquier caso que un año antes. Para esta fundación, generadora de ideología del partido Republicano, un gasto público del 44% del PIB, como es el de España, resulta insultante.
El resultado de España no le permite todavía estar entre los 33 países a los que se considera ‘mayormente libres’, que son los que cuentan con un resultado entre 70 y 80, quedándose en el grupo, 54 países, ‘moderadamente libres’. Sólo los cinco líderes, Hong Kong, Singapur, Nueva Zelanda, Suiza y Australia, con un resultado mayor de 80 puntos, tienen economías consideradas como ‘libres’. Los 38 primeros, entre los que este año aparece por vez primera Letonia y recuperan plaza Bostwana y Bahamas, se supone que son los que han creado un ambiente institucional en el que los individuos y la empresa privada pueden disfrutar de una libertad económica que capacita para conseguir una mayor prosperidad.
Alemania, Israel, Lituania y Polonia, consiguen su mejor clasificación
En total han sido 97 países los que han mejorado su posición, de los cuales 32 marcaron una puntuación récord, entre ellos Alemania, Israel, Lituania, Polonia, Filipinas y Vietnam. Entre los nuevos récord figuran 12 países del área subsahariana. La de arena correspondió a 74 países, que bajaron de puntuación, entre ellos hay 19 economías desarrolladas, incluyendo a Estados Unidos, Japón y Suecia. La economía estadounidense, que cayó de libre a moderadamente libre en 2010, registró el año pasado su peor resultado en puntuación desde que se realiza el estudio
El índice publicado este año muestra que la libertad de inversión en el mundo mejora un punto de media, y 0,8 puntos, el control del déficit público, y 0,7 puntos, la corrupción, mostrando también mejoras la libertad de comercio y la inflación. El peor comportamiento se produjo en el mercado de trabajo, con una caída de 1,6 puntos de media mundial, reflejando el estancamiento del empleo y una acuciante necesidad, según el think tank estaodunidense, de flexibilizar más el mercado laboral.