Japón ha entrado en la fase crítica de limpieza de la planta nuclear de Fukushima. A finales de mes, Tokyo Electric Power comenzará a retirar las placas de combustible del estanque como primer paso de un procedimiento que durará al menos 30 años. Un suceso como el terremoto que originó la catástrofe pondría en serio peligro la bañera del combustible, y podría causar el mayor desastre nuclear de la historia, filtrando gigantescas radiaciones a la atmósfera.
Desde La Celosía recomendamos la lectura relacionada de:
Cinco años después del accidente de Fukushima la radioactividad en el mar es normal
La radiación marina de Fukushima llega a América, pero los científicos minimizan su impacto