Si se toma como referencia el mundo del deporte bajo ningún concepto se puede hablar de una Unión Europea en decadencia. En los Juegos Olímpicos que se disputan en Río, los 28 países que conforman la UE (incluido todavía el Reino Unido) superan de largo en medallas totales y en oros a la suma de la hiperpotencia, Estados Unidos, y de China, a pesar de que entre ambos, con 1.600 millones de habitantes, triplican la población de la UE.
En los anteriores Juegos, disputados en Londres, los países de esta Unión, siempre noticia por elementos negativos, estancamiento económico, deuda, inmigración, etcétera, obtuvieron 92 medallas de oro, mientras que Estados Unidos ocupó el segundo lugar con 46 y China, el tercero, con 38, por lo que los europeos superaron a la suma de ambos. En Pekín se produjo un empate debido a que la UE contaba con un país menos en el año de su celebración (2008), Croacia, y además China puso toda la carne en el asador, más bien toda la marmita llena de pócimas mágicas, para conseguir un resultado espectacular. Así fue y China obtuvo 51 medallas de oro mientras que Estados Unidos obtuvo 36 logrando entre ambos empatar en oros con la Unión Europea que cosechó 87.
En los Juegos de Atenas (2004), aunque en la Unión Europea sólo figuraban 25 países, sin Bulgaria, Rumania y Croacia, el club obtuvo 80 medallas de oro frente a 36 de Estados Unidos y 32 de China. En los del nuevo siglo (2000), celebrados en Sidney, una UE de solamente 15 países volvió a barrer con 79 medallas, cifra que no alcanzaron juntos estadounidenses y chinos, con 37 y 28 respectivamente. Ya en los últimos Juegos del siglo XX, los de Atlanta, los europeos del club de 15 ganaron 75 medallas de oro, mientras que los otros sumaron 60, de los cuales 44 correspondieron a los norteamericanos y China ganaba 16.
A falta de pocos días para la finalización de los actuales Juegos que se celebran en Río, los estadounidenses encabezan el medallero por países, con 86 en total, y los chinos son terceros, con 52, y en oros, los del otro lado del Atlántico cuentan con 28 frente a 17 de China. Sumando los de ambos quedan muy lejos de la Unión Europea. Tan lejos que sólo el Reino Unido supera en oros (19) a China. En total y hasta ahora, los países de la Unión Europea han conseguido 77 medallas de oro, repartidas entre 17 países, casi doblando la cifra de la suma de estadounidenses y chinos. Si se atiende al medallero absoluto, Estados Unidos a día de ayer había logrado 86 y China, 52, una cifra casi idéntica a los oros de los Juegos de Pekín lo que es una señal muy clarividente como para sospechar de dopaje masivo por parte china en 2008. Mientras que chinos y estadounidenses han sumado hasta ahora 138 medallas en total, los países de la Unión Europea, 22 de ellos, han conseguido 219. Sólo Chipre, Malta, Luxemburgo y Letonia están sin trofeo.
Con estos resultados no resulta extraño que la industria deportiva europea como sector económico sea muy boyante, y los países de la UE exportan jugadores de equipo y entrenadores de forma masiva a las ligas y equipos de otros países, incluyendo a la hasta hace no muchos años la inalcanzable NBA, liga de baloncesto de Estados Unidos.
La cultura deportiva es un factor fundamental en la ventaja de Europa
El hecho de que la Unión Europea en su conjunto barra en materia deportiva a pesar de su menor potencia demográfica a la suma de dos colosos como Estados Unidos y China se debe principalmente a una mayor cultura deportiva en el Viejo Continente por historia y tradición, lo que permite a los europeos competir en todas las competiciones con posibilidades de podio y a una población con una media-mediana de educación física claramente superior.
La demografía es un factor muy relevante, a mayor cantidad es más fácil obtener más calidad, pero siempre que se acompañe de otras variables. En solitario no dice nada. Un caso paradigmático es el de India, que con 1.400 millones de habitantes solamente ha obtenido hasta ahora una medalla de bronce en lucha. En Londres, donde consiguió su mejor resultado olímpico cosechó seis medallas, dos de plata, en tiro y lucha, y cuatro de bronce, tiro, lucha, bádminton y boxeo. Tampoco Pakistán, acérrimo enemigo de India, ambos con religiones diferentes, obtiene apenas nada a pesar de contar con más de 200 millones de habitantes.
India y Pakistán cuentan con sus propios deportes, muy populares, pero que no son olímpicos, y son fanáticos del cricket, del que, rara avis, siendo de origen británico no está aceptado por el Comité Olímpico Internacional. La pobreza endémica del país impide también a la mayor parte de la población acceder al juego deportivo, y su representación de deportistas en los Juegos de Río no llega a 130, frente a los más de 300 de España. India era muy buena en hockey hierba, especialidad deportiva en la que ha conseguido un récord de 8 oros, pero desde que la hierba natural dejó paso a la artificial, lo que ha primado el físico frente a la técnica, no consiguen podios.