La Federación Europea del Asalariado Accionariado (EFES, por sus siglas en inglés), que incluye también a las cooperativas y sociedades laborales es una organización con sede en Bruselas que aspira a federar a todos los asalariados accionistas, las empresas, sindicatos y toda persona interesada en la promoción del accionariado asalariado. Éste se considera por esta organización, reconocida por la Comisión Europea como Organización Europea Representante de Empresas, como un factor de progreso y productividad para las empresas, que mejora generalmente los resultados económicos y sociales, la calidad y el nivel de empleo.
Todos los años publica un informe sobre la situación del accionariado de los empleados en las grandes empresas europeas, concretamente la muestra alcanza a 31 países europeos, 2.636 grandes compañías europeas y 36 millones de empleados. Recientemente ha publicado el de 2016 con unos resultados que a muchos pueden sorprender. Así, en 2016 el porcentaje de capital en manos de los empleados en grandes compañías batió su récord, con el 3,2% (1,42 corresponde a ejecutivos y 1,78% al resto), que contrasta con el 2,48% de hace 10 años.
El 3,2% del capital en dinero suma 325.000 millones de euros. Los activos por persona se han duplicado hasta 42.000 euros, que bajan a 23.000 euros si se descuenta el capital de los altos cargos. El informe muestra que cada vez son más las grandes empresas que desarrollan planes de participación de los empleados en la propiedad de la compañía. El año pasado, un 94% de las grandes empresas tenían planes para que los asalariados sean accionistas, y el 53% lo hacían para toda la plantilla, mientras que un 63% contaban con planes de opciones sobre acciones.
El 28% de las grandes empresas lanzaron nuevos planes el año pasado, aunque con importantes diferencias según los países. Algunos, como Reino Unido, Austria y Noruega aumentaron mucho los incentivos fiscales para los planes de hacer accionistas a los empleados, ya que consideran que es una vía muy beneficiosa, un camino que también han seguido, aunque con menores primas, España, Dinamarca, Rumanía y Polonia. No obraron de esta forma otros, como Francia, Holanda o Grecia. Por su parte, Alemania sigue siendo reacia a promover la propiedad entre los empleados
Destaca Reino Unido, donde el 28% de los empleados son accionistas de sus empresas
En el Reino Unido, el 28% de los empleados de grandes empresas tienen acciones de sus compañías, por el contrario en los países del continente el porcentaje bajó del 20%. Esto supone que en los últimos 5 años, hay un 12% menos, 800.000, de accionistas empleados fuera de las islas británicas, y en éstas hay un 14% más, 300.000. En definitiva, lo que está ocurriendo es que fuera de Reino Unido, hay menos empleados que son accionistas, pero con más dinero. Otra fuente de desigualdad que ha aflorado especialmente desde que comenzara la crisis.
En España, el deterioro de los últimos años es enorme. De 2011 a 2016 la caída de asalariados accionistas ha sido del 22,2%, habiendo bajado de 218.871 en 2011 a solamente 170.375 el año pasado. Además, las diferencias entre el capital que tienen los ejecutivos y el resto son abrumadoras. De las 98 compañías que cotizan en Bolsa y que entran en la muestra total correspondiente a España (163, incluidas 47 cooperativas), los ejecutivos (173) tienen el 1,64% del capital. Por el contrario, el resto de empleados ordinarios, que suman 121.316 son propietarios del 0,26% del capital de sus empresas, frente al 1,64% de media europea. España es el país de la Unión Europea que menos empresas de las que cotizan en Bolsa tienen planes para hacer accionistas a sus empleados, estando por debajo solamente Portugal y los que han entrado los últimos años en la Unión procendentes del ex bloque soviético, con un porcentaje que no llega al 60% frente al 85% del resto. Solo las cooperativas y sociedades laborales españolas figuran en las clasificaciones de las empresas con más participación, y gracias a la participación de estas en la muestra sube hasta algo más del 1% del capital el porcentaje que los empleados ordinarios controlan (recuérdese que de las que cotizan en Bolsa sólo era el 0,26%.