El Banco Central Europeo (BCE) ha publicado esta semana los primeros trabajos de una serie de Papeles Estadísticos, con el fin de disponer de cifras que permitan comparar mejor elementos y funciones económicas de los diferentes países. El primer informe elaborado corresponde a los resultados de la primera ola de la encuesta sobre la situación financiera y el consumo de los hogares. Si bien es cierto que el hecho de que el año de referencia tomado haya sido 2010 distorsiona la comparativa, al igual que la diferente composición de lo hogares según países y otros factores , se ha intentado corregir las distorsiones, y los resultados sirven de indicadores para la toma de decisiones políticas y monetarias.
La muestra realizada sobre 62.000 hogares en 15 países aporta datos sobre el activo de las familias, inmobiliario y financiero y la deuda, hipotecaria y otras. Confrontando estas cifras se llega a saber la riqueza neta. El estudio determina también la renta, que es el factor más relevante especialmente en épocas de crisis, así como el consumo en alimentación, dentro y fuera de casa, y el acceso al crédito.
Los datos más relevantes, más allá de la carga política que tienen los de riqueza, comentados en otro artículo reciente, son los de endeudamiento, ya que dicen mucho sobre la quiebra de España. Los hogares españoles son los que más dinero de sus ingresos dedican a pagar sus deudas con mucha diferencia sobre el resto, quitando las estadísticas de Chipre que son absolutamente disparatadas. Si se tiene en cuenta solamente a los hogares endeudados, los de España dedican el 19,2% (dato de mediana) de su renta a pagar la deuda asumida, frente al 9,4% de los alemanes, 13,1% de los italianos, 12,6% de holandeses y 16% de nuestros vecinos de Portugal. Hay que tener en cuenta que estas cifras han empeorado ya que muchos de los hogares endeudados han perdido renta debido al desempleo.