Un nuevo estudio sobre la evasión y la elusión fiscal del especialista en la materia, el economista francés Gabriel Zucman, profesor en la London School of Economics, cifra en 7,6 billones de dólares, 6 billones de euros, la riqueza escondida por las personas físicas en los paraísos fiscales del mundo. Es una cantidad brutal, equivalente a seis veces el producto interior bruto de España y el 8% de todos los activos financieros del mundo.
El estudio de Zucman ha sido publicado en el último número de ‘Journal of Economic Perspectives’, una de las revistas editadas por la prestigiosa American Economic Association, fundada en 1985 y animadora intelectual del debate económico mundial. Zucman describe y analiza en su obra ‘Taxing across Borders: Tracking Personal Wealth and Corporate Profits’ las formulas utilizadas tanto por particulares como por empresas para la elusión y la ocultación fiscal.
Los europeos esconden el doble que los estadounidenses
En contra de lo que se puede presumir por los rankings de riqueza que suelen aparecer en las revistas especializadas y valoraciones de los bancos dedicados a gestionar altos patrimonio, no son los americanos los que ocultan más su fortuna, quizás por el temor que les asiste al estar muy castigada penalmente la evasión fiscal. Sostiene Zucman que son los europeos los que gestionan más sus fortunas en paraísos fiscales, concretamente da la cifra de 2,6 billones de dólares (2,1 billones de euros), ocupando el segundo lugar los millonarios asiáticos, que cobijan fuera del alcance del fisco, 1,3 billones de dólares, mientras que los estadounidenses mantienen 1,2 billones y los millonarios de los países del Golfo Pérsico, 800.000 millones.
A la postre, los países donde residen todos los patriotas defraudadores dejan de ingresar en conjunto 190.000 millones de dólares, más de 150.000 millones de euros. Los modelos que ha utlizado el economista francés con datos de fuentes oficiales, como el Tesoro de Estados Unidos, Banco Nacional de Suiza y otros, muestran que en 2012 el 9% de toda la capitalización de las empresas cotizadas en Wall Street, donde Apple superó ayer los 700.000 millones de dólares, está en manos de inversores con sede en paraísos fiscales, bien sean fondos especulativos (hedge funds) domiciliados en Islas Cayman, bancos suizos, fondos mutuos de Luxemburgo o particulares con residencia en Mónaco, islas del Canal, etcétera. Este porcentaje del 9% apenas alcanzaba el 2% en los años noventa y el 3% en el año 2000.
Zucman pone algunos ejemplos ilustrativos de cómo se produce la elusión-evasión fiscal. Así, un empresario que quiere enviar fondos a paraísos fiscales, primero crea una compañía sin actividad en las Islas Cayman o en Delaware, donde es incluso más fácil crear compañías anónimas, e incluso en países de la UE, como Luxemburgo. Esta empresa sin actividad abre una cuenta en Hong Kong, donde tienen oficina todos los bancos del mundo. La empresa real del potencial defraudador contabiliza la compra de servicios ficticios, de coartada fácil como son los de gestión, a la empresa vacía y paga por esos servicios desde la cuenta de Hong Kong. Como los bancos ganan comisiones por las transferencias, las autoridades chinas admiten este tipo de cuentas, y los registradores y agentes-notarios de las Cayman también hacen negocio, para qué estropearlo.
La operación genera una trazabilidad que no es ilegal y por consiguiente no dispara ninguna alarma, que son bastante malas, en los departamentos antiblanqueo de los bancos porque se integran en el conjunto de millones de operaciones que realizan a diario. El defraudador gana dos veces, primero rebajando el beneficio contable de su empresa generando gastos falsos, y en segundo lugar con la llegada del dinero al banco de Hong Kong o de otro paraíso fiscal que utilice, se puede invertir en todo tipo de activos financieros que rentan intereses. Las Haciendas sólo pueden cargar impuestos sobre las rentas y eso en el caso de que los bancos informen al Fisco, lo que ahora se pretende con los acuerdos de intercambio automático de información, que no estará listo hasta 2017-18 y no en todos los paraísos. A la postre, el patrimonio que genera esas rentas está oculto al fisco.
Los haberes de extranjeros en Suiza suman 2 billones de euros según cifras oficiales
Como decíamos, el economista francés ha llevado a cabo sus cálculos con modelos que extrapolan datos reales de lugares como Suiza. A junio de este año, el dinero que los extranjeros tenían en bancos del país, según el Banco Nacional de Suiza, era de 2,46 billones de dólares, y en Luxemburgo sumaban 370.000 millones. El estudio indica que de las fortunas europeas se gestionan el 10% en los lugares vetados a la mirada indiscreta del Fisco, porcentaje que es del 4% en Estados Unidos y en Asia. Los campeones del ocultamiento son los latinoamericanos, con un 22% de las fortunas ocultadas, los rusos, con el 50%, africanos, el 30% y los exuberantes ricos de los países del Golfo lideran la tabla con el 57% de sus fortunas gestionadas en paraísos fiscales.