Joan Subirats, catedrático en Ciencia Política, sostiene en un artículo publicado en ‘El País’ que los partidos políticos han perdido funcionalidad y calidad representativa por ser en su versión más predominante organizaciones anacrónicas respecto a un modelo de democracia que ya no se puede limitar a la versión de representación y delegación. En una sociedad más preparada y con las nuevas tecnologías permitiendo el acceso fácil al conocimiento y compartirlo masivamente, los partidos deberían ayudar a que ese conocimiento social se aprovechase para cambiar las cosas.
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