Los multimillonarios Bill Gates y Ted Turner controlan con sus donaciones la Organización Mundial de la Salud
La ambición de Bill Gates por controlar y refundar a nivel mundial el sistema de salud lleva a su fundación a copar, con el apoyo de otros multimillonarios, puestos estratégicos, denominados eufemísticamente ‘comisiones de servicio’ dentro de la Organización Mundial de la Salud (OMS). La Fundación Bill y Melinda Gates es el mayor financiador no estatal de la OMS. Su aportación anual, que supera los 200 millones de dólares, ha obligado a reconocer a ejecutivos de la Organización que su influencia en las áreas de salud “corre el riesgo de sofocar los diversos puntos de vista de otros expertos de la comunidad científica”. Sus generosas donaciones no son ajenas al nombramiento de un directivo de la fundación como gerente de operaciones del programa y gestión de clúster de la polio de la OMS. La Iniciativa de Erradicación Mundial de la Poliomielitis, apoyada por Gates, elabora una estrategia para la eliminación total de esta enfermedad en 2018.
Bill Gates plantea una nueva OMS para responder con eficacia a futuras epidemias
“Hay una posibilidad significativa de que una epidemia de una enfermedad mucho más infecciosa que el Ébola ocurrirá en algún momento en los próximos 20 años”, vaticina Bill Gates en el New England Journal of Medicine. El multimillonario que más dinero ha destinado contra la lucha de las enfermedades infecciosas –un referente es el centro contra la malaria del doctor español Pedro Alonso– recuerda las grandes epidemias padecidas durante el siglo 20, incluyendo la gripe española de 1918-1919 y la actual pandemia del Sida. Para responder de manera contundente a las futuras, Gates plantea un sistema de alerta y respuesta de brotes bajo el mando de una nueva organización mundial, con suficiente autoridad y fondos para ser eficaz. “Una epidemia derivada de causas naturales o bioterrorismo podrían matar a más de 10 millones de personas en todo el mundo”, advierte.
La OMS se plantea retirar el antigripal Tamiflu de la lista de 300 ‘medicamentos esenciales’ por su ineficacia
La Organización Mundial de la Salud (OMS) plantea eliminar el antigripal Tamiflu, fabricado por Roche, de la lista de 300 ‘medicamentos esenciales’. Fue incluido en 2009 para actuar contra una pandemia, identificada como cepa de la gripe pandémica H1N1. También fue recetado contra la gripe aviar procedente de China. Tras acceder a los ensayos clínicos de oseltamivir (componente de Tamiflu), Cochrane, una red de profesionales de la salud, concluye -sobre la base 46 ensayos que cubren 24.000 pacientes-, que únicamente redujo los síntomas de gripe menos de un día y no evitó que aumentaran las admisiones en los hospitales. Por el contrario, el Consorcio PRIDE, dirigido por Stella Muthuri de la Universidad de Nottingham, tras revisar 29.000 pacientes ingresados llegó a la conclusión de que el uso de Tamiflu reduce la mortalidad en un 19%. Este último estudio fue financiado por Roche.
Thomas Frieden, máxima autoridad sanitaria de Estados Unidos, alerta de la gran amenaza de las virulentas “tres toses”
Jorge de Lorenzo El síndrome respiratorio de Oriente Medio (MERS), la tuberculosis resistente a los fármacos y la manipulación de microbios para ser utilizados como armas biológicas son tres amenazas para la salud mundial, según certifica el doctor Thomas Frieden, director del Centro para el Control y la Prevención de Enfermedades, máxima autoridad sanitaria de Estados Unidos. Identificar las enfermedades emergentes de manera rápida y adecuada es un paso fundamental. “Un punto ciego en cualquier parte del mundo es un peligro en todo el mundo”, advierte Frieden.