Los límites de velocidad impiden gozar de cualquier automóvil con un motor rugiente. Los italianos han convertido a Ferrari en una marca para coleccionistas, con series limitadas y listas largas de espera. Otras marcas míticas como Lamborghini o Bugatti están en manos de los alemanes, concretamente del grupo Volkswagen, pero también éstos aspiran a convertirlas en joyas. El Bugatti Chiron ha sido presentado en el salón de Ginebra y ha causado admiración por su diseño y todos sus detalles, además de contar con un motor de 1.500 caballos de potencia, que le hacen ser el más veloz del mundo,c on 420 kilómetros por hora y una aceleración de 0 a 100 en 2,5 segundos. Una maravilla de mecánica, diseño y acabado. Es una joya y como tal su precio es de 2,4 millones de euros.