Los primeros datos de 16 economías avanzadas arrojan diferencias significativas en la actividad de las empresas emergentes o startups en 2020. Su número se ha desplomado en el sur y el este de Europa. En el caso de Rumania, Portugal y Rusia, esta disminución es de una cuarta parte con respecto a 2019, con caídas de hasta el 26%. En España la creación de startups se ha reducido en una quinta parte, con caídas del 21%, según un informe de Peterson Institute.
En Alemania el descenso ha sido de tan sólo el 4%, aunque es probable que la situación cambie con la creación del programa “Future Fund” de 10.000 millones de euros para nuevas empresas en 2021. KfW, el banco de desarrollo estatal de Alemania, invertirá en fondos de capital de riesgo alemanes para alentar a las instituciones privadas a invertir más en startups. Francia se ha comprometido de manera similar a recaudar 5.000 millones de euros para nuevas empresas al lograr que los inversores institucionales co-inviertan.
Estados Unidos dispara la creación de startups
En los Estados Unidos el número de startups se disparó un 23% en los primeros tres trimestres de 2020 en relación con el mismo período en 2019, antes de que golpeara la pandemia de COVID-19. Este es el mayor aumento de cualquier país de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE) o el G20 con datos disponibles. También se registran aumentos significativos en el espíritu empresarial en Turquía (23%), Chile (14%) y el Reino Unido (9%). Otros países, China, Estonia, Suiza, Australia y los Países Bajos, muestran aumentos modestos en el número de creación de nuevas empresas.
Se han sugerido tres hipótesis para explicar el crecimiento diferencial de los nuevos negocios en las primeras etapas de la recuperación económica. El primero es cambiar las preferencias de los clientes durante COVID-19 que crean oportunidades para los emprendedores. En el Reino Unido, por ejemplo, el 20% de las nuevas empresas creadas en el tercer trimestre de 2020 fueron minoristas. El crecimiento de los nuevos negocios minoristas podría reflejar el aumento de las compras en línea durante el COVID-19, cuando las ventas por Internet como porcentaje de todos los minoristas en el Reino Unido aumentaron del 19% antes de la pandemia al 33% en mayo de 2020.
La formación de empresas durante la pandemia
En segundo lugar, las nuevas empresas surgen más rápidamente en las economías donde los procedimientos administrativos para iniciar una empresa son más fáciles. Los países con un proceso más rápido para iniciar una empresa han tenido más probabilidades de experimentar un repunte en la formación de empresas durante la pandemia.
Una tercera hipótesis para el aumento de startups se atribuye al espíritu empresarial por necesidad. Las tasas de desempleo locales más altas predicen aumentos en el espíritu empresarial estadounidense durante las recesiones pasadas. Las oportunidades más limitadas en el sector salarial pueden haber incentivado el espíritu empresarial por necesidad.
Sin embargo, es posible que el desempleo no tenga la correlación correcta durante la pandemia, ya que el nivel de las prestaciones por desempleo y otros subsidios también es muy importante. En Francia, por ejemplo, las prestaciones han sido muy generosas y los trabajadores que están en paro parcial durante el COVID-19 pueden sobrevivir sin intentar emprender otra actividad.